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Abro mis ojos. Veo a mi alrededor. Elijo algo de mi agrado, busco el perfecto punto fijo, y analizo. Analizo de dónde acabo de despertar.
¿Qué soñé? ¿qué sentí? ¿sentí? Busco entre recuerdos, entre anécdotas, qué acabo de ver. Nunca antes lo he visto. ¿Será otra realidad, otro mundo? Observo cada detalle (de lo que recuerdo, claro) de mi imaginación. ¿Qué querrá decir? ¿Qué ME querrá decir mi inconsciente? ¿Habrá algo? Y de pronto me inundo de enorme desesperación, dolor, angustia. ¿Y saben por qué? Porque la mayoria de las personas, suelen tenes hijos por quienes cuidar y preocuparse antes que uno, las personas también tienen mascotas que darle amor y alimentar (y peor porque esos nunca aprenden a hablar para decir como se sienten y que quieren), y en este caso particular, lo único que tengo que hacer es cuidarme a mi.
Llega un punto que ya se torna insoportable. No puede ser que no pueda estar analizando mi inconsciente porque tengo a mi estómago sollozando, como un niño de 4 años, diciendo "tengo hambre, tengo hambre, y mi ajo? Y mi desayuno? Tengo hambreee". Y lo peor de todo es que no puedo decirle a alguien "andá alimentar al gato, o al nene, que no dejan de joder" porque está adentro mio. Entonces ya queda interrumpido mi estudio del inconsciente. Freud estaría decepcionado de mi. Y todo por acostumbrar a mi estómago a una rutina.
Sucede que a medida que pasan las horas del día, normalmente el cerebro va procesando otro tipo de información, y lo que soñamos no son mas que otro recuerdo perdido en la exosfera. Muchas personas, cuando despiertan, ya despiertan diciendo "no soñé nada", a algunos les pasa de vez en cuando, y a otros siempre. Existen otras personas que sueñan todos los dias, otras de vez en cuando. A algunos (tristemente) se les repite alguna pesadilla cada vez que sueñan, otros (por suerte) repiten momentos agradables.
Lo malo de lo sueños es que nunca los entendemos. Nunca entendemos qué nos quieren decir. Y lo peor es que muchas veces los sentimos reales. Un arma de fuego disparando hacia nosotros, la pérdida de un ser querido, esa angustia y dolor. Algunas personas se despieran llorando. También algunes se levantan mojados, ya sea por la desesperación, o sueños humedos.
Pero lo bueno de los sueños es que también sentis cosas bellas. Abrazar alguien que hace mucho no ves, comer algo que te encanta. Es increíble cómo parecen estar activos todos nuestros sentidos en otra realidad. Hasta sentimos amor mientras dormimos.
El mundo de los sueños me parece algo fascinante. Que pienso seguir leyendo y estudiando hasta el dia de mi muerte.
Mientras mas pensamos en ellos, podemos tener un mejor control, y dejar de tener pesadillas o soñar cosas que nos hacen sentir mal.
Suerte con ello bros!